Existen restricciones dimensionales y visuales cuando se planifica una cirugía con imágenes 2d y, para superar estas dificultades, se puede fabricar una réplica o modelo del órgano deseado en tercera dimensión a partir de una tomografía digital 3 D. La réplica permite a los cirujanos ver el órgano en tamaño real y observar cualquier defecto estructural para lograr así una planificación del tratamiento previo, acortando el tiempo de cirugía y mucho más precisa.
VENTAJAS